En "Un recuerdo de luz", el épico desenlace de la saga La Rueda del Tiempo de Robert Jordan y Brandon Sanderson, los hilos de innumerables destinos se tejen en el tapiz final de una historia que ha cautivado a millones. La humanidad se alza en vilo ante la Última Batalla, una confrontación apocalíptica donde se decide el destino de un mundo acosado por las fuerzas oscuras. A medida que la Rueda gira, la era actual se tambalea al borde del abismo, preparándose para un nuevo ciclo o para su devastación total.
La novela arranca en un momento crítico, con los líderes de las naciones reunidos en Campo de Merrilor. Aquí, se debaten entre seguir al Dragón Renacido, Rand al'Thor, quien propone romper los sellos de la prisión del Oscuro —un acto que podría liberar al mal absoluto o ser la única esperanza de salvación— o detenerlo, temiendo que la locura lo haya consumido. Mientras tanto, Egwene, la Sede Amyrlin, ve la propuesta de Rand como un grave error.
Simultáneamente, el caos se desata en Andor donde los trollocs invaden Caemlyn, y en el Sueño del Lobo, Perrin Aybara enfrenta al temible Verdugo. Por otro lado, Mat Cauthon, ahora unido a Tuon, la emperatriz de Seanchan, se dirige a Ebou Dar, planeando estrategias que podrían cambiar el curso de la guerra. Cada personaje se ve arrastrado hacia Shayol Ghul, el núcleo de las tinieblas, donde se librará la batalla final.
A lo largo de las páginas, Sanderson y Jordan tejen una narrativa rica y compleja, llena de acción, intriga y desarrollo emocional, culminando en una confrontación que no solo determinará el destino de sus personajes sino de todo el cosmos conocido. Los ejércitos de la Luz y la Sombra se enfrentan en un clímax desgarrador, donde antiguas profecías se cumplen y los corazones de los héroes son puestos a prueba como nunca antes.
"Un recuerdo de luz" no es solo la conclusión de una serie, sino una obra maestra de la alta fantasía que ofrece un cierre poderoso y satisfactorio. Los lectores que han seguido esta monumental saga desde el principio encontrarán en este último volumen, un final sorprendente y emotivo, digno de la odisea que Robert Jordan comenzó y Brandon Sanderson completó con maestría, basándose en los detallados apuntes dejados por Jordan tras su muerte. Esta novela no solo cierra un capítulo, sino que eterniza el legado de La Rueda del Tiempo como una de las series más emblemáticas del género.