Viajes por el Scriptorium, escrita por Paul Auster y publicada en 2006, es una obra que se sumerge en los territorios de la metaficción para explorar temas recurrentes en la literatura de Auster como la realidad versus ficción, la soledad, y la incertidumbre metafísica. Esta novela nos presenta a Mr. Blank, un anciano confinado en una habitación misteriosa sin recuerdos de su identidad o de cómo llegó ahí.
La narrativa se desarrolla en un espacio cerrado y claustrofóbico donde cada objeto, marcado con una etiqueta, parece tener una significancia escurridiza. Entre documentos y fotografías que Mr. Blank no puede comprender, se revela que está siendo constantemente observado. La historia se despliega a través de un informe que detalla sus movimientos y las visitas de varios personajes que parecen conocerlo y que tienen cuentas pendientes con él.
Los visitantes, figuras de otras obras de Auster, oscilan entre el resentimiento y la gratitud hacia Mr. Blank. Por un lado, tenemos a personajes como Anna, quien cuida de él con afecto a pesar de un pasado turbio entre ellos. Por otro lado, están aquellos que se sienten agraviados por acciones pasadas, insinuando que Mr. Blank podría ser responsable de destinos trágicos o injustos. Estas interacciones gradualmente proporcionan pistas sobre quién podría ser Mr. Blank y por qué se halla en tal situación.
La obra se convierte en una reflexión sobre la creación literaria y el poder del autor sobre sus creaciones, representando una lúdica pero sombría exploración de la responsabilidad y las consecuencias de los actos creativos. Al avanzar la narrativa, los límites entre el creador y sus criaturas se desdibujan, llevando al lector a cuestionar la naturaleza de la realidad y la ficción.
En última instancia, Viajes por el Scriptorium no solo es una historia sobre un hombre atrapado en una habitación, sino también un diálogo entre un autor y sus personajes, una meditación sobre la memoria, la identidad y el lenguaje. Auster, a través de esta obra, invita a los lectores a reflexionar sobre las complejas interacciones entre el creador y su cosmos literario. A pesar de que algunos lectores pueden encontrar el final abierto y enigmático, la novela permanece como un fascinante experimento metaficcional que desafía nuestra percepción de la narrativa y la autoría.
