En "¿Y a ti qué te importa?" de Megan Maxwell, nos sumergimos en la vida de Noelia Stella Rice Ponce, una aclamada actriz de Hollywood de raíces españolas, quien se ve envuelta en una serie de eventos inesperados durante la promoción de su última película en España. Aquí, el destino la empuja hacia un reencuentro con Juan Morán, un viejo conocido de Las Vegas, que ahora trabaja como un aguerrido miembro del Grupo Especial de Operaciones (GEO). A pesar de los esfuerzos de Juan por mantenerse alejado del brillo y las complicaciones que representa Noelia, ambos descubrirán que el destino tiene otros planes para ellos.
La novela se desenvuelve en un contexto donde se entrelazan el glamour de Hollywood con la rigurosa y peligrosa vida de un GEO, explorando cómo dos mundos aparentemente opuestos pueden colisionar. La historia avanza mostrando cómo la atracción inicial, basada en recuerdos y un encuentro fortuito, se transforma en un vínculo más profundo y complicado debido a las circunstancias de sus vidas y los desafíos que enfrentan.
Maxwell maneja la trama con un estilo fresco y directo, característico de su escritura, permitiendo que los diálogos fluidos y el desarrollo de los personajes lleven el peso de la narrativa. La evolución de la relación entre Noelia y Juan se presenta con realismo y un toque de humor, evitando caer completamente en clichés románticos, aunque no sin algunos giros predecibles hacia el final que sirven para crear el necesario clímax dramático de la obra.
A pesar de ciertas críticas sobre la superficialidad en la representación del entorno de Hollywood y un estilo narrativo que podría beneficiarse de mayor profundidad en descripciones y contexto, la novela logra capturar el interés del lector. Se destaca por ser una lectura entretenida, ideal para quienes buscan una historia de amor contemporánea con personajes carismáticos y situaciones que oscilan entre el drama y la comedia.
En resumen, "¿Y a ti qué te importa?" es una comedia romántica que engancha y entretiene, demostrando que, a veces, los opuestos no solo se atraen, sino que pueden encontrar un camino común, incluso en las circunstancias más inverosímiles. Es un buen ejemplo del estilo narrativo de Megan Maxwell, que sigue conquistando a lectores aficionados al género romántico con cada nueva publicación.
