"Y de repente fue ayer", la intrigante novela de Boris Izaguirre, nos transporta a una Cuba convulsionada por el cambio y la revolución, donde dos amigos, Óvalo y Efraín, se encuentran en el epicentro de transformaciones profundas tanto en su país como en sus vidas personales. A través de un estilo narrativo rico y evocador, Izaguirre teje la historia de estos dos personajes cuyos destinos se entrelazan irremediablemente tras el azote de un huracán que los empuja hacia caminos revolucionarios divergentes.
Óvalo, con su carisma desbordante, se sumerge en la turbulencia de la política, aspirando a moldear el futuro de Cuba desde las esferas del poder revolucionario. Mientras tanto, Efraín, menos imponente pero igualmente complejo, opta por una revolución de otro tipo: la creación de un nuevo género televisivo, la telenovela, que promete capturar las esperanzas y sueños de un pueblo. Juntos, y a veces en oposición, estos dos hombres exploran las diferentes facetas de la influencia y la autoridad.
La novela también profundiza en las complicaciones de un triángulo amoroso, introduciendo a Aurora, una mujer cuya relación con ambos hombres añade una capa adicional de tensión y drama a la narrativa. Aurora se convierte en un símbolo de los deseos compartidos y conflictivos que Óvalo y Efraín deben enfrentar, en medio de su lucha por definir sus identidades y lograr sus ambiciones.
A través de un recorrido emocional y político, "Y de repente fue ayer" explora temas de amor, poder, y redención. Izaguirre, con su característico estilo lírico y perspicaz, construye un mundo donde los personajes principales se ven constantemente desafiados por su entorno, obligados a confrontar no solo sus ideales y aspiraciones, sino también los fantasmas de su pasado. Esta obra promete no solo entretener, sino también provocar una reflexión profunda sobre la naturaleza del cambio, la revolución y el impacto perdurable de las historias que contamos.
Publicada en 2009 por la Editorial Planeta, esta novela se presenta como un espejo de las transformaciones sociales y personales, y se ha convertido en una lectura esencial para los aficionados a la literatura contemporánea iberoamericana. A través de sus 575 páginas, Boris Izaguirre captura la esencia de una era y un país al borde de la revolución, explorando la capacidad del arte y la política para transformar vidas y sociedades.
